Otro fin de semana y los que seguimos la fórmula 1 nos quedamos perplejos de las lagunas legales que existe en la legislación de este deporte. La carrera de ayer en Valencia tuvo un antes y un después. Antes del accidente de Webber y después del mismo. En primer lugar no desear a nadie lo que le ocurrió a Webber, y desearle lo mejor al piloto australiano. En segundo lugar indicar, una vez más, que los coches lentos deberían estar en la GP2. Son un peligro para los pilotos, es como si tuviesen un plus de peligrosidad y las carreras de 2010 sean de obstáculos. Ayer Webber tuvo un accidente que podía haber sido peor y por culpa de ese empecinamiento de la ma FIA de dar espectáculo a este deporte. ¿Estos energúmenos no saben que conducen personas?. Y como colofón final el comodín Hamilton. Todas las semanas tiene uno. Es una vergüenza que se siga permitiendo a este piloto todo lo que hace mal y después vaya la norma de inflexible. Señores de la ma FIA, no es bonito que gane el que uno quiere por capricho, ¿qué desean que Hamilton sea bicampeón?. Pues a este ritmo lo consiguen. La suerte que tiene Fernando Alonso es que está en Ferrari y no se van a quedar las cosas así, esto va a cambiar y a Luisito no le van a salir las cosas siempre bien. No le deseo el mal a nadie, pero este chico no es bueno. No me quedo con otra cosa de este fin de semana, sólo con la indignación y el malestar de ver algo irreal creado después de un trágico accidente. Llegarán tiempos mejores, estoy seguro.
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